Con la llegada de Darío Melo, todas las señales llevan a concluir que el arco albirrojo estará a buen resguardo durante la temporada 2022.
Al momento de su explosiva aparición, el nuevo cuidatubos del Uní Uní, asomó como uno de los grandes proyectos en el fútbol chileno, al punto que fue el encargado de custodiar el arco chileno en el torneo Sudamericano U20 de Argentina el 2013 y posteriormente, el mismo año, el Mundial de la categoria en Turquía.
Darío Esteban Melo Pulgar que nació hace 28 años en la comuna de Quinta Normal, mide 1 metro con 78 centímetros, desarrollando gran parte de su carrera profesional en Palestino, su club de origen, y en el que sus buenas actuaciones lo hicieron ganarse un nombre en el fútbol nacional.
El hombre que ahora aspira a convertirse en el cuidatubos albirrojo mostró su agrado de haber llegado al ‘Gigante de Aconcagua’, “la verdad es que me he sentido muy cómodo; si bien es cierto llevaba un periodo cercano a los tres meses que no realizaba trabajo de campo, me ha costado muy poco ir tomando ritmo. Llevamos ya un tiempo de entrenamientos, ahora el objetivo es hacer que las piezas encajen de buena forma para que el equipo funcione correctamente y sea competitivo”, aseguró.
Al igual que el resto del plantel y los hombres que se incorporaron para esta temporada, Melo se puso metas muy altas, “en la parte personal solo quiero volver a jugar y ser feliz haciéndolo, quiero sentir ese compromiso con esta profesión; en lo grupal la idea es llegar lo más arriba posible, y para lograrlo la clave será en que cada partido lo tomemos como una final, esa es mi mentalidad y la de todos mis compañeros. Yo espero dar mi mejor versión”, manifestó.