El 2 a 0 en contra sufrido ante Cobreloa, no empañó en lo absoluto la extraordinaria campaña del equipo Sub 21 de Unión San Felipe en el torneo de Fútbol Joven, donde logró instalarse de manera muy merecida en la ronda de los ocho mejores.
Con las horas avanzadas desde la eliminación de la competencia, conversamos con el técnico Miguel Sánchez, para conocer cuáles eran sus impresiones de un traspié que dolió, pero que ya fue debidamente digerido en todas las estructuras del club: “Fue un partido muy parejo en el que solo las desconcentraciones nuestras permitieron que la balanza se inclinara hacia el lado de ellos. Desde la apertura del marcador a los 17’ del primer tiempo intentamos por todos los caminos llegar al empate, generamos variantes en ataque que nos permitieron crearnos muchas ocasiones de gol que no pudimos concretar. El segundo tiempo fue similar, aunque ellos(Cobreloa) estuvieron más replegados; tuvimos que correr riesgos para igualar y precisamente en una contra nos convirtieron el segundo gol”, explicó el entrenador.
El profesor Sánchez reconoció que hubo mucha tristeza al interior del grupo, pero dejó muy en claro que, “no hay nada que reprochar porque los chicos dejaron todo en la cancha, y les hice saber que no tenían que sentir culpa porque estas instancias son así, y que todo esto es parte del proceso de aprendizaje que los llevará a convertirse en jugadores profesionales”, afirmó.
La evaluación global de lo hecho por el cuadro U21 sanfelipeño es a todas luces positiva, eso el técnico lo dejó muy claro: “Fue una temporada especial, hay que recordar que el año pasado solo se jugó una o dos fechas, después vino una para muy larga que en la práctica obligó a partir de cero, porque el poder jugar no tiene punto de comparación con entrenar. En estos niveles es fundamental competir, y este equipo eso lo hizo muy bien, acá quedaron cosas muy positivas”, culminó.