La mayoría-por no decir todas- de las veces, empatar en calidad de forastero se considera un buen resultado. Sin embargo, la igualdad albirroja ante San Luis, no puede calificarse de esa manera, y es que el 2 a 2, fue doloroso e inentendible porque hasta muy cerca del final del cotejo, nada hacía presagiar que el triunfo se esfumaría de la peor manera posible.
Hasta el primer descuento ‘canario’, Unión San Felipe estaba haciendo un partido correcto, no brillante, pero era superior en todas las facetas del juego, por lo que la ventaja de 2 a 0 era inobjetable, “en líneas generales hicimos las cosas de manera correcta, pero en estas instancias no se pueden dar los espacios o desaplicaciones como sucedió en el segundo gol de ellos. San Luis es un equipo fuerte en los balones detenidos, eso lo sabíamos, por eso hay tanta amargura por dejar escapar puntos importantes”, reflexionó el técnico Jonathan Orellana.
Temas que resonaron muy fuerte en el post partido, fueron los cambios y las desconcentraciones. Ante esto el estratego reaccionó con las siguientes palabras: “Quizás se pudieron hacer antes (los cambios), pero son situaciones puntuales. Lo concreto es que se debe estar aplicados en todo momento, y ahora tuvimos seis minutos lamentables que nos echaron a perder todo; es evidente que hay que mejorar para estar con más fuerza el próximo partido”.